El Comienzo
- Poly Georgeff
- 10 jun
- 1 Min. de lectura
Esa noche no podía dormir. Me desperté de no saber qué hacer con mis miedos, con mis dudas, con mis tibiezas. Colapse en llanto, cansada. Llore tantas horas que el agua de mis lágrimas me corría hasta los pies. Intenté caminar hacia el baño. Las piernas me temblaban. Pensé en llamar a alguien pero para qué? La vida se había vuelto tan superficial. Había pasado todo tan rápido. Nacer, la escuela, el deporte, el liceo, el primer beso, la facultad, la primera vez, el primer trabajo, vivir sola, novio, auto y un buen trabajo. Esta era yo? En el fondo del cristal, una desconocida me miraba. Me desesperé ante la urgente necesidad de encontrarme conmigo misma.
En la ventana del cuarto se paró una gaviota y escuché un susurro intrigante
-¿Quién te dijo que necesitas de eso para ser feliz ?
Comments